Juan Carlos Cincotta
Gobierno corporativo + Compliance + La profesión hoy
Seguimiento y estudio de un cambio de paradigma que está transformando el escenario empresario y profesional
En la actualidad se registra un crecimiento constante del caudal normativo que impacta sobre las organizaciones. Este fenómeno se verifica en todo el mundo desarrollado y Argentina no es la excepción. Los Gobiernos generan una cantidad cada vez mayor de leyes y normas de distinto rango, de múltiples organismos reguladores, de campos y temáticas muy diferentes, que deben ser receptadas, procesadas y cumplidas a la par de las actividades operativas.
Los riesgos de los eventuales incumplimientos son variados y es difícil cuantificarlos. Existen riesgos penales, civiles, profesionales, administrativos y hasta el nuevo riesgo reputacional capaz de fulminar a una organización en forma casi instantánea.
Los sujetos activos de este proceso son los miembros de los Directorios, de los Comités de Auditoría y de las Sindicaturas de las sociedades anónimas, así como los auditores externos y sus organismos reguladores, responsables de asegurar la vigencia de plataformas contables y de auditoría independiente, compatibles con las mejores prácticas internacionales.
En estos aspectos los deberes de las organizaciones comprenden una amplia gama de controles y obligaciones, así como la emisión de diversas informaciones públicas requeridas por los reguladores y los mercados, entre las que se destacan los estados financieros y todos los documentos asociados. El acatamiento de todos estos deberes se ha convertido en una función en sí misma, que ha dado en llamarse compliance o cumplimiento normativo.
Creemos necesario divulgar, estudiar y discutir los alcances y características de las disposiciones que regulan estos procesos. Para ello, aquí se plantean enfoques dirigidos a lograr su cumplimiento, poniendo el foco en el aprovechamiento efectivo de las prácticas obligadas por las normativas y los reguladores. Es decir que su observancia no sea meramente formal, lo que significaría solo un costo, sino que su aplicación inteligente permita agregar valor a la organización y contribuir a la defensa del interés público.